La ineludible digitalización de la logística frente a los efectos del cambio climático en la cadena de suministro
Cuando los desastres naturales y eventos climáticos de todo tipo (huracanes, terremotos, sequías, inundaciones, incendios, etc.) están influyendo y afectando el transcurso planificado de las cadenas logísticas mundiales, ya podemos asegurar que el cambio climático impacta de lleno en la cadena de suministro global. Sin embargo, las empresas pueden paliar los efectos negativos de todos estos contratiempos gracias a la digitalización de los procesos y la optimización de las operaciones. En este artículo abordamos cómo la digitalización de las empresas puede ayudar a paliar los efectos del cambio climático en la cadena de suministro. Pero primero de todo vamos a ver los efectos del cambio climático sobre la cadena de suministro en la forma de incidencias provocadas por eventos (y desastres) naturales.
Índice de contenidos sobre digitalización logística frente al cambio climático
1. Interrupciones logísticas por eventos climáticos extremos
Los eventos climáticos severos, como huracanes, inundaciones, incendios forestales y olas de calor son cada vez más frecuentes e intensos. Estos fenómenos interrumpen el transporte y las operaciones logísticas al dañar infraestructuras críticas, como puertos, aeropuertos, carreteras y redes ferroviarias. Además, afectan la disponibilidad de mano de obra y la capacidad de las empresas para cumplir con los plazos de entrega.
1.1. Interrupciones en la cadena de suministro global
Los eventos climáticos no afectan solo las operaciones locales, sino que también causan interrupciones en las cadenas de suministro globales, que dependen de la sincronización y de la producción en diferentes regiones del mundo. Si un proveedor clave se ve afectado por un desastre natural, toda la cadena puede sufrir retrasos y sobrecostos.
2. Escasez de recursos y materias primas
El cambio climático afecta a la disponibilidad de recursos naturales como agua, cultivos, minerales y combustibles. Esto afecta industrias que dependen de estos insumos para fabricar productos, lo que resulta en aumento de costos y dificultades para mantener niveles estables de producción.
3. Aumento de costos operativos
La necesidad de adaptar las operaciones logísticas a un clima cambiante aumenta los costos. Las empresas deben invertir en infraestructuras resilientes al clima, como almacenes con mayor protección contra inundaciones, o rutas de transporte alternas que eviten zonas vulnerables a desastres naturales. Además, las regulaciones ambientales más estrictas están llevando a un aumento en los costos derivados de alcanzar el cumplimiento de estas regulaciones ambientales, como la necesidad de reducir emisiones de carbono o utilizar combustibles más limpios.
Las nuevas regulaciones sobre emisiones de carbono en la Unión Europea obligan a las empresas de transporte a implementar flotas de vehículos más sostenibles, lo que representa un mayor gasto inicial en la compra y adaptación de vehículos.
4. Cambio en la demanda de productos
El cambio climático también está afectando los patrones de demanda. Los consumidores están cambiando sus preferencias hacia productos más sostenibles y las empresas se ven presionadas a reducir su huella ambiental. Esto puede requerir cambios en la cadena de suministro para ofrecer productos con menores emisiones de carbono, utilizar empaques reciclables o fabricar con procesos más sostenibles.
5. Riesgos financieros y aseguradores
Con el aumento de eventos climáticos extremos, las aseguradoras están incrementando las primas para cubrir los riesgos relacionados con desastres naturales, lo que eleva los costos para las empresas que operan en zonas vulnerables. Además, la inestabilidad en la cadena de suministro genera riesgos financieros para los inversores y las empresas.
ADAPTARSE A ESTOS DESAFÍOS SERÁ CRUCIAL PARA MANTENER LA COMPETITIVIDAD
Las empresas están buscando diversificar sus cadenas de suministro, aumentar la resiliencia y adoptar prácticas más sostenibles. Además, la digitalización y el uso de herramientas avanzadas como el machine learning y la inteligencia artificial están ayudando a prever y mitigar riesgos climáticos antes de que impacten gravemente.
¿Cómo la digitalización de las empresas puede ayudar a paliar los efectos del cambio climático en la cadena de suministro?
La digitalización de las empresas puede ser una herramienta clave para mitigar los efectos negativos del cambio climático en la cadena de suministro global, mejorando la resiliencia, la eficiencia y la capacidad de adaptación ante eventos climáticos adversos. ¿Cómo? Es lo que vamos a desarrollar a continuación.
1. Optimización del transporte y reducción de emisiones
El uso de software avanzado de gestión de transporte (Transport Management Software, TMS, por sus siglas en inglés) permite optimizar las rutas de distribución, minimizando las distancias recorridas, tiempos de espera y el consumo de combustible. Al optimizar las rutas, las empresas pueden reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y disminuir su huella de carbono, algo fundamental en la lucha contra el cambio climático. La solución eDelivery de la suite de software Effylog permite optimizar la gestión del reparto de mercancías a cliente final.
Al nivel de la gestión global de la cadena de suministro, plataformas meteorológicas ahora apoyadas con IA y análisis de datos pueden “predecir” los patrones climáticos y sugerir rutas alternativas para evitar zonas afectadas por fenómenos meteorológicos extremos, evitando interrupciones (con bastante acierto, aunque la multitud de variables en juego imposibilitan la certeza absoluta).
2. Visibilidad en tiempo real y trazabilidad
La integración entre los diferentes sistemas de gestión de la empresa proporciona visibilidad en tiempo real de los flujos de activos, bienes, materiales, productos, etc. Esta trazabilidad permite a las empresas detectar problemas o retrasos antes de que se conviertan en una crisis. Esta visibilidad también facilita que las empresas puedan velar por la sostenibilidad de sus procesos y a mantener estándares de calidad a lo largo de la cadena de suministro.
El software clave e indispensable para una gestión óptima de los procesos intralogísticos es el SGA. (Sistema de Gestión de Almacenes). El SGA Effylog-WMS destaca por la eficiencia de sus funcionalidades.
3. Almacenamiento inteligente y gestión de inventarios
Los sistemas de almacenamiento digitalizados (Warehouse Management Systems, WMS, por sus siglas en inglés) permiten una gestión más eficiente del inventario, reduciendo el desperdicio de productos y optimizando el uso del espacio. Con estos sistemas, se puede prever la demanda con mayor precisión, lo que ayuda a evitar el exceso de stock y los costos asociados con el transporte innecesario o el almacenamiento prolongado.
Por ejemplo, un almacén gestionado con un SGA potente puede tener un control de stock efectivo que le permita ahorrar en recursos y no derrochar en productos sobrantes o que se caducan en el almacén.
La gestión eficiente del almacén, de stocks e inventarios puede reducir el gasto energético y la cantidad de desechos, además de facilitar la reutilización y la salida de productos además de solo reponer los necesarios en la cantidad adecuada. Todos estos efectos son beneficiosos para la sostenibilidad y el cuidado del medio ambiente.
4. Colaboración digital con socios de la cadena de suministro
Las plataformas digitales permiten una mejor colaboración entre proveedores, transportistas, fabricantes y distribuidores. Al compartir datos de forma transparente, todas las partes de la cadena pueden ajustar rápidamente sus operaciones ante eventos climáticos adversos. Esta colaboración reduce el riesgo de malentendidos, errores en la planificación o interrupciones en la cadena de suministro.
Ejemplo: eCollaboration es el conjunto de soluciones de tipo portal que permiten el acceso a distintos actores de la cadena de suministro para poder interaccionar con el almacén y las operaciones de Effylog-WMS.
5. Economía circular y sostenibilidad
La digitalización también apoya modelos de negocio más sostenibles, como la economía circular, donde los productos y materiales se reutilizan y reciclan en lugar de ser desechados. Sistemas digitales de gestión como el SGA pueden ayudar a rastrear y optimizar el ciclo de vida de los productos, facilitando su recuperación y reutilización.
6. Reducción del uso de papel y procesos físicos
La automatización y digitalización de procesos, como órdenes de compra, facturación y gestión documental, reduce significativamente el uso de papel y otros recursos físicos. Esto no solo contribuye a reducir las emisiones derivadas de la producción de papel, sino que también hace que los procesos sean más eficientes y rápidos, reduciendo tiempos de respuesta y mejorando la capacidad de adaptación a eventos imprevistos.
La implementación de sistemas ERP (Enterprise Resource Planning) y SGA (Sistema de Gestión de Almacenes) que integran toda la operación de la empresa y del almacén permiten una transición hacia oficinas sin papel, lo que ayuda a reducir la huella de carbono y mejora la agilidad operativa.
En resumen, la digitalización permite una cadena de suministro más ágil, eficiente y resiliente ante los impactos del cambio climático. La capacidad de prever eventos, optimizar procesos, reducir emisiones y mejorar la colaboración a lo largo de toda la cadena da a las empresas una ventaja competitiva crucial en un entorno cada vez más incierto. Y como decimos siempre: ¡La tecnología es el aliado que hace a las cadenas de suministro tan fuertes como flexibles!