Kaizen para la optimización de la intralogística
En el mundo empresarial de hoy, marcado por la volatilidad y la competencia feroz, la mejora continua no es solo una ventaja, sino una necesidad. Kaizen, palabra japonesa traducible por “mejora continua”, no se trata solo de un concepto abstracto, sino de una práctica constante que busca optimizar todos los procesos y áreas de la vida, y por ende, de una organización. Por consiguiente, una de las áreas de la empresa sensible a ser mejorada de forma continuada es la intralogística.
Esta filosofía, esencial para la resiliencia y la competitividad de la empresa, también juega un papel crucial en la motivación y el compromiso de los equipos. Los empleados, si ven que contribuyen a un proceso de mejora constante, se sienten parte de algo que cuenta con ellos, y se sienten más motivados y comprometidos con los objetivos de la empresa. En este contexto, la filososfía Kaizen, con su enfoque en la mejora continua, se presenta como una herramienta poderosa, especialmente cuando se aplica al área de la intralogística, un componente vital para el rendimiento operativo y la eficiencia.
En la dinámica actual, donde los mercados se transforman a una velocidad sin precedentes, la capacidad de adaptarse y mejorar de manera continua no es solo deseable, sino esencial.
Índice de contenidos sobre Kaizen para intralogística
Qué significa kaizen
Kaizen es una palabra japonesa que significa “cambio para mejorar” o “mejora continua”. Es también una filosofía que se enfoca en la eficiencia y la calidad en todos los aspectos de la vida. La gestión empresarial moderna se alimenta significativamente de esta filosofía y la ha convertido en un enfoque común en las empresas. Como por ejemplo con las metodologías “Lean”.
Esta filososfía se basa en la idea de que siempre es posible encontrar formas de mejorar los procesos y las prácticas. Además, todos los empleados, desde la alta dirección hasta los trabajadores de base, deben estar involucrados en este proceso de mejora. El concepto de kaizen enfatiza la importancia de pequeñas mejoras constantes que, cuando se suman, resultan en cambios significativos y en una mayor eficiencia operativa.
Kaizen fomenta una cultura de cuestionamiento y análisis constante de los procesos para encontrar pequeñas mejoras que, acumuladas, resultan en significativos beneficios a largo plazo.
Qué significa intralogística
La intralogística se define como la gestión de los flujos de activos (materiales, productos e información asociada) dentro de los límites de una instalación de producción o distribución. Esto incluye todas las operaciones relacionadas con la recepción, el almacenamiento, el transporte interno, la manipulación de materiales, la preparación de pedidos y el despacho de mercancías. En resumen, la intralogística abarca todos los procesos que ocurren dentro de un almacén o distribuidora.
Una intralogística eficiente es crucial para garantizar que los productos correctos estén en el lugar correcto, en el momento correcto y en las condiciones adecuadas, lo que a su vez asegura la satisfacción del cliente y la eficiencia operativa.
Pero no se queda solo de puertas para adentro. La intralogística bien ejecutada se traduce en una mayor productividad y agilidad de las operaciones. Por lo que es un factor crítico en la cadena de suministro y un determinante clave del éxito empresarial de cada sector industrial. Si las empresas de un sector no implementan sistemas internos eficientes, la cadena del sector sufre y se tensiona. Nuestro mundo está siempre conectado y una cadena es tan fuerte como su eslabón más débil.
Cómo la filosofía kaizen optimiza la intralogística
La filososfía kaizen en la intralogística puede transformar significativamente las operaciones de un almacén. Al aplicar los principios de mejora continua, las empresas pueden identificar y eliminar los desperdicios, optimizar los flujos de trabajo y mejorar la eficiencia y la productividad general. Veamos a continuación como el enfoque kaizen transforma la intralogística de un almacén.
1. Eliminación de desperdicios
Antes de nada, hay que puntualizar que los “desperdicios” a los que nos referimos son los definidos por la metodología Lean. La metodología Lean (ideada por Taiichi Ohno en los años 80, para la mejora de la productividad en la fabricación de vehículos Toyota) establece 7 “muda”, palabra japonesa que se traduce como “desperdicio”, y que son todo aquello que no supone un valor añadido para el cliente final, y por lo tanto, que se puede prescindir. En algunos textos, puedes encontrar que en vez de “desperdicios” se habla de “derroches”.
En intralogística, los desperdicios pueden presentarse de diversas formas, como:
- El exceso de stock.
- Los movimientos innecesarios de productos.
- Los tiempos de espera prolongados.
- Los cuellos de botella.
- Los errores que generan devoluciones…
La filososfía kaizen busca identificar estos desperdicios y encontrar maneras de eliminarlos o reducirlos. Consiguientemente, al reducir los desperdicios, se reducen los costos y se aumentan los beneficios.
Kaizen puede ser visto como una de las herramientas o pilares fundamentales dentro de la metodología Lean. Mientras que Lean proporciona el marco y los principios para identificar y eliminar desperdicios, Kaizen ofrece el enfoque para la mejora continua de los procesos y la involucración de todos los miembros de la organización. Juntos, Lean y Kaizen, crean un entorno propicio para la eficiencia operativa y la innovación constante, lo que resulta en una mayor satisfacción del cliente y el mejor rendimiento empresarial.
2. Establecimiento de flujos de trabajo eficientes en un almacén
Al analizar y mapear los procesos intralogísticos de forma constante, las empresas pueden identificar áreas de ineficiencia y, por tanto, oportunidades de mejora. A partir de este análisis, se pueden reorganizar los flujos de trabajo, mejorar la disposición de las instalaciones y optimizar la disposición de los productos para facilitar un movimiento más fluido y eficiente. Esto puede incluir:
- La reorganización de los espacios de trabajo.
- La optimización de las rutas de picking.
- La mejora de las operativas de etiquetaje.
- La verificación de los preparados para los envíos.
- El control de las expediciones…
Todo ello desemboca en un flujo de trabajo más eficiente en el almacén, una reducción del tiempo del ciclo, la eliminación de errores y una mayor satisfacción del cliente.
3. Potenciar el sentimiento de pertenencia de los empleados
Kaizen fomenta la participación de todos los empleados en el proceso de mejora. Al empoderar a los trabajadores para que identifiquen problemas y sugieran soluciones, las empresas pueden aprovechar una amplia gama de experiencias y perspectivas, lo que resulta en mejoras más efectivas y sostenibles.
Esta participación no solo mejora la motivación y la satisfacción laboral, sino que también fomenta la innovación y el compromiso con la eficiencia logística, dado que los trabajadores están en la mejor posición para identificar áreas de mejora en sus operaciones diarias.
4. Mejora continua de la calidad de los productos
Kaizen, en el caso de adoptarse, no solo buscaría la eficiencia en términos de tiempo y costos, sino también en la calidad de los productos y servicios. Al mejorar continuamente los procesos intralogísticos, las empresas pueden reducir los errores, los daños a los productos y las devoluciones, lo que conduce a una mayor satisfacción del cliente.
En la percepción de calidad del producto que tiene el cliente, se incluye el tiempo que tarda en recibirlo, el estado del empaquetado de envío y del packaging del producto, las condiciones de devolución, y obviamente, la exactitud entre lo pedido y lo recibido.
Mejorar todos estos aspectos significa mejorar la calidad del producto que compra y recibe el cliente, y por ellos lo juzgará negativamente o positivamente, lo que concluirá en una recomendación en las múltiples redes sociales, o en una queja.
5. Establecimiento de estándares y seguimiento del rendimiento
Kaizen implica establecer estándares claros y monitorear continuamente el rendimiento contra estos estándares. Esto es particularmente importante en la intralogística, donde los indicadores clave de rendimiento (KPIs) pueden medir la eficiencia. Estos KPIs pueden ser los niveles de stock, los tiempos de entrega, las devoluciones, las pérdidas desconocidas, entre otros. La revisión regular de estos KPIs ayuda a identificar áreas de méjora. Además, puede confirmar si las acciones de mejora aplicadas con anterioridad están resultando en los beneficios esperados, y que se mantengan a largo plazo.
6. Adopción de tecnología y automatización
La optimización de los procesos intralogísticos a menudo implica la adopción de nuevas tecnologías para, entre otras cosas, la automatización. Esto puede incluir sistemas de gestión de almacenes (SGA), sistemas de asistencia a los empleados como el pick-to-light o el pick-to-voice, robots autónomos para picking (AMR) y vehículos guiados automáticos (AGVs), los dispositivos de recolección de datos, etc. Estas tecnologías reducen errores, aumentan la velocidad y mejoran la seguridad en el almacén.